El Mundo
Burriana avisa de que el ruido del tráfico también puede motivar la declaración de ZAS.
La Universidad de Valencia ha iniciado las mediciones en el casco urbano.
El consistorio ya dispone del informe de los chiringuitos.
Sandra Morales.
Terra
Cultura-fallas 12-11-2007
Artistas, profesionales y vecinos hablarán sobre sostenibilidad en las fallas
El Foro de Debates de la Universitat de València, la Junta Central Fallera y el Gremio Artesano de Artistas Falleros, con la coordinación de la Associació d'Estudis Fallers (ADEF), han organizado el ciclo de conferencias 'Les falles a la Nau', que en su tercera edición estará dedicado a la sostenibilidad ambiental y social de la fiesta fallera.
Dos falleros se abrazan ante la falla Exposición-Micer Mascó.
Artistas, profesionales y vecinos hablarán sobre
Según fuentes de las entidades convocantes, estos debates, que se celebrarán los días 10 y 20 de noviembre en el edificio histórico de la Universitat en la calle La Nau, son 'una apuesta por el diálogo entre los diversos agentes implicados en la fiesta, como instituciones públicas, falleros, artistas, vecinos, especialistas y profesionales'.
La sostenibilidad de las Fallas es 'uno de los principales retos que se le plantean a las Fallas en el futuro más inmediato y que en los últimos años ha cobrado actualidad fruto de las transformaciones experimentadas por la fiesta y la sociedad que la celebra', según las mismas fuentes.
En la primera sesión se hablará de la sostenibilidad ambiental de las Fallas, que incluye los posibles efectos contaminantes causados por la cremà, el tratamiento de los residuos, la racionalización del consumo energético o la contaminación acústica generada por la fiesta.
La segunda mesa de debate estará dedicada a la sostenibilidad social de las Fallas, y en ella se analizarán las polémicas derivadas de la ocupación de las calles y de los espacios públicos por parte de la fiesta, así como el cambio en las relaciones con el vecindario.
En la primera sesión, moderada por el periodista Antonio Santo Juan, intervendrán Joan Francesc Álvarez (químico), Víctor Belloch (biólogo y técnico en educación ambiental), Alejandro Santaeulalia (artista fallero), Amando García (catedrático de física aplicada de la Universitat de València y vicepresidente de la Sociedad Española de Acústica) y Emilio Tamarit (presidente de la Falla Lepant-Guillem de Castro).
En la segunda sesión, moderada por el periodista Daniel Borrás, participarán Antonio Pla (vicepresidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Valencia), Daniel Buj (presidente de la Interagrupació de Fallas), Josep Boix (vicepresidente cuarto de la Junta Central Fallera, responsable del área de Participación Ciudadana y Festiva), Francisco Pérez Puche (periodista) y Auxiliadora Sotodosos (técnica de Protección Civil).
En esta tercera edición de 'Les Falles a la Nau', colaboran también la Universitat Politècnica de València, la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, la Federación de Fallas de la Sección Especial, la Asociación de Fallas de Especial, la Federación de Fallas de la Sección Primera A y la Federación de Fallas con Especial Ingenio y Gràcia.
Terra Actualidad - EFE
Granada Hoy
Verdades y mentiras sobre el ruido en Granada (y II)
Granada 12/11/2007 02:52
http://www.diariogranadahoy.com/197848_ESN_HTML.htm
Los resultados de la investigación permiten observar dos cosas: primero, que la molestia en Granada no es superior a la de otras ciudades con un nivel semejante de contaminación acústica; segundo, que las variables no acústicas influyen en la molestia incluso más que las variables acústicas. Esto último, que puede sorprender al ciudadano no experto, es un resultado que refuerza el comentario que hacía antes sobre la complejidad de la valoración de la molestia y lo cauto que hay que ser al opinar sobre este tema.
Con cierta frecuencia leemos artículos escritos por asesores legales y especialistas jurídicos que, con toda razón, informan sobre "batallas" que se van ganando contra el ruido. Sin embargo, estos artículos no suelen presentar bien a la Administración local que, normalmente, resulta ser uno de los "malos de la película". En el caso de Granada, este punto de vista no le haría justicia. Un Ayuntamiento debe disponer de dos cosas para luchar contra el ruido. Por un lado, argumentos legales que apoyen sus actuaciones. Por otro lado, determinación y ganas de actuar.
Con respecto a lo primero, la normativa se ha ido completando desde que, en el año 2002, la Unión Europea publicara la directiva 2002/49/CE. Sin embargo, los ciudadanos deben saber que la Ley del Ruido, de 2003, no ha visto completado su desarrollo reglamentario (el que establece cómo hay que hacer las cosas que dice la Ley) hasta el pasado 23 de octubre. Cuatro años son demasiados. En Andalucía la reciente Ley GICA, que incluye las disposiciones sobre ruido, deberá tardar bastante menos. El Ayuntamiento, como el ciudadano, es otro "sufridor" de estos retrasos.
Precisamente, el Grupo de Expertos en Contaminación Acústica del Congreso Nacional de Medio Ambiente (Conama) lleva, desde 2004, analizando y debatiendo el desarrollo reglamentario de la normativa sobre ruidos. En su seno se analizan las diferentes propuestas y se estudia la mejor forma de defender el interés general en la lucha contra el ruido. No en vano, son muchos los retos técnicos que se presentan y que complican el cumplimiento de dicha norma. Su correcta formulación puede condicionar su efectividad y en este objetivo están afectados, por igual, particulares, empresarios y la propia Administración. Los trabajos del Grupo de cara a la próxima edición del Congreso en diciembre de 2008, CONAMA9, ya han comenzado, lo que da idea de la importancia que este tema tiene en el contexto nacional.
Con respecto a lo segundo, sería injusto negar la determinación y ganas de actuar del Ayuntamiento de Granada. La gestión del ruido urbano no es un asunto trivial y el enfoque dado puede condicionar en gran medida el resultado. Desde mi punto de vista, la mejor opción es considerar los vínculos que presenta este problema con otras áreas de gestión municipal, para dar un enfoque integrado a la gestión del ruido. Este enfoque integrado es el que se pretende en Granada y el que permite las iniciativas puestas en marcha en la ciudad. Cualquier otro planteamiento sólo generaría soluciones parciales y ocasionaría, en la mayoría de los casos, un uso deficiente de los recursos empleados.
Por ello, me parece totalmente injusto que los granadinos nos maltratemos de forma insistente denunciando que somos la capital más ruidosa de Andalucía, de España y hasta del mundo entero, olvidando que los pasos que se están dando para la minimización, control y gestión del ruido son, en muchos casos, singulares y únicos en España. Es decir, es verdad que existe un problema de ruidos en Granada, pero no es cierto que el Ayuntamiento sea insensible y no esté dando los pasos adecuados para encontrarle solución. Opino que es hora de cambiar el discurso sobre el ruido en Granada y de introducir nuevos argumentos. De otra forma, el conjunto de típicos tópicos acabarán teniendo permanentemente en nuestra ciudad otro elemento, el ruido, ofreciendo a nuestros visitantes una imagen que no le hace justicia en virtud del esfuerzo que se está realizando para combatir esta forma de contaminación.
Jerónimo Vida Manzano
Profesor titular de la Universidad de Granada y coordinador del Grupo de Acústica de CONAMA9
Más elementos para la reflexión: cuando se denunció la situación acústica de Granada en el año 2000, la noticia se hacía eco de una información elaborada con datos del año 1993. No discuto que en 1993 la situación de Granada, en el contexto andaluz, fuera la expresada en esa noticia. Sin embargo, la realidad en el año 2000 era otra, al igual que hoy mismo es otra. No digo mejor ni peor, sólo que es otra, distinta, y que las iniciativas puestas en marcha determinarán objetivamente en su momento. Iniciativas adecuadas para la correcta gestión del ruido en Granada pues se basan en la prevención, tal y como exige el modelo de desarrollo sostenible y los más elementales principios de sensatez humana.
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