La asociación de vecinos Juan Llorens investigó a la líder de la organización crítica con la ZAS
Arrancapins-La Petxina asegura que la presidenta de la nueva entidad vecinal es apoderada de uno de los locales de ocio de la zona - Ester Manrique explica que nunca ocultó nada y defiende su derecho a protestar como vecina
Levante – 24-10-09 - JOSÉ PARRILLA VALENCIA
Ester Manrique, presidenta de la nueva asociación. levante-emv
La Asociación de vecinos de Arrancapins-La Petxina ha investigado a la presidenta de la recién creada Asociación de Vecinos de Juan Llorens, Ester Manrique, para ver si la mueven intereses personales en su petición de retirada de la Zona Acústicamente Saturada (ZAS). Y parece que los ha encontrado, pues según dicen, Ester Manrique es apoderada de uno de los pubs de la zona, lo que unido a sus quejas anteriores precisamente por problemas de ruido, la incapacitarían, dicen, para representar a los vecinos. Ella asegura, sin embargo, que nunca ha ocultado nada a nadie y que tanto ella como los 109 vecinos que la han elegido tienen derecho a defender sus posiciones en esta materia.
La Asociación de Vecinos de Juan Llorens nació a principios de mes con la idea inicial de luchar contra la ZAS y defender el carácter propio del barrio, compaginando el derecho al descanso con el derecho al ocio. Sin embargo, la otra asociación de la zona, la de Arrancapins-La Petxina, que ha sido la que ha forzado en los tribunales y en el Ayuntamiento la declaración de la ZAS, siempre ha creído que detrás de esta entidad competidora había intereses ocultos. Y claro, lo primero que han hecho ha sido investigar a su presidenta.
Según explicó Pep Romero, vicepresidente de Arrancapins, lo primero que hay que denunciar de Ester Manrique es que ella misma se quejó en una ocasión del ruido de la calle, concretamente de una máquina expendedora de bebidas y comida, y que fue su asociación, a la que perteneció durante dos meses, la que le hizo un papel para que denunciara el caso ante el Ayuntamiento.
En segundo lugar, precisa, Manrique es apoderada del pub "Kalimba", situado en el número 61 de Juan Llorens, lo que vendría a demostrar que "tienen intereses particulares " y que su actuación "siembra muchas dudas".
"Con este expediente -explicó Pep Romero- no puede representar a los vecinos", de manera que Arrancapins-La Petxina se opondrá a que la nueva entidad vecinal pase a formar parte de la comisión de seguimiento de la ZAS. Es más, "si el Ayuntamiento lo permite ya sabemos por donde va el Ayuntamiento", añadió.
Tanto la investigación como las acusaciones vertidas contra ella han cogido por sorpresa a Ester Manrique, no porque sean mentira sino porque nunca ha ocultado nada a nadie. De hecho, ella asegura, "todo eso se lo he contado de viva voz al presidente de la otra asociación, Antonio Puchades".
Sobre la máquina de bebidas, asegura que es cierto que se quejó del ruido que generaba, "pues los coches paraban allí y terminaban haciendo botellón en la calle", dice. De todas formas, asegura que "eso no tienen nada que ver con lo que estamos diciendo del barrio, de las terrazas, de la vigilancia policial, de los cortes de tráfico etc.".
Y por lo que respecta a su vinculación con uno pub de la zona, dijo que ella es apoderada de dos empresas dedicadas a la hostelería y los negocios inmobiliarios, una de las cuales efectivamente apodera el pub Kalimba. "Pero yo no estoy hablando como empresaria, sino como vecina y en nombre de los 109 vecinos que me han elegido. Yo y mis compañeros tenemos el mismo derecho que cualquiera a defender lo que pensamos", explicó.
Dispuesta a dimitir
En cualquier caso, Ester Manrique aseguró que si ella es un problema para su asociación no tiene ningún inconveniente en dimitir y que sea otro compañero el que dirija la entidad, sobre todo si eso puede suponer un obstáculo para entrar a formar parte de la comisión de seguimiento de la ZAS, que es su principal objetivo.
La presidenta de la Asociación de vecinos de Juan Llorens se mostro, así mismo, profundamente decepcionada con la otra entidad vecinal, pues después de la reunión con su presidente, Antonio Puchades, salió con la sensación de que podían acercar posturas y trabajar juntos para mejorar la vigilancia policial, por ejemplo.
´Las medidas no están funcionando´
La Asociación de Vecinos de Arrancapins-La Petxina ha denunciado el incumplimiento de las medidas incluidas en la ZAS y la escasa efectividad de las mismas. Su idea, por tanto, es solicitar al Ayuntamiento la inmediata reunión de la comisión de seguimiento para, con los resultados de los sonómetros en la mano, reforzar estas medidas o adoptar unas nuevas. Pep Romero aseguró en la zona de Juan Llorens sigue habiendo demasiado ruido, básicamente porque las terrazas no se están retirando a la hora prevista y la presencia policial apenas se nota. "Se ponen en ambos extremos de la calle, pero no patrullan por dentro para disuadir a la gente de que meta jaleo", explica. Dice, además, que el problema es mucho más amplio que eso, pues el ruido, a su juicio, se produce por la mala insonorización de los locales, los volúmenes altos, la gente gritando en la calle, el aparcamiento en doble fila y el ruido de cláxons, el botellón, e incluso la limpieza de las calles en horas inapropiadas.
J. P.valencia.
La Vall endurecerá las multas contra los comercios que se publiciten ´fuera de sitio´
Policías de paisano empezarán a vigilar que se recojan los excrementos de las mascotas en la calle
Levante – 24-10-09 - E. MORENO LA VALL D'UIXÓ
La concejala de Interior de la Vall d'Uixó, Elena Vicente-Ruiz, anunció ayer que el equipo de gobierno va a modificar la ordenanza municipal relativa a la publicidad en el municipio, ya que ha denunciado que la Vall "está llena de publicidad ilegal por todas partes, ya que la ordenanza municipal recoge que está prohibido poner publicidad fuera de los lugares indicados, así es que vamos a aumentar las sanciones de la ordenanza, enviaremos primero una carta a los comercios que se están anunciando para que tengan esta información, y después pasaremos a aplicar la ordenanza"
La edil anunció que ya han recibido permiso de la Subdelegación de Gobierno para poner a varios policías de paisano vigilando que se cumpla la ordenanza de tenencia de animales de compañía, para que los dueños de los perros la cumplan y recojan los excrementos de sus mascotas. En otro orden de cosas, Elena Vicente-Ruiz ha anunciado que a partir de la próxima semana los agentes de Policía Local llevarán a cabo una campaña de control del ruido de los ciclomotores. De la misma forma, primero se les informará y después se sancionará.
Asimismo, también se está controlando las plazas donde habitualmente se hace botellón ya que, tal y como ha explicado la edil , "está prohibido beber en la calle, molesta a los vecinos y además luego nuestras plazas se quedan sucias". La Policía Local también hace redadas en discotecas y control en supermercados para que no se venda alcohol a menores.
Vecinos de Augas Mansas denuncian que las voladuras interrumpen las clases
El ruido de las obras de la tercera ronda impide a los escolares de Rías Altas desarrollar el curso con normalidad
Vista de las obras de la tercera ronda, ayer, a su paso por Augas Mansas. / juan varela
Los vecinos de Augas Mansas anuncian que las obras de la tercera ronda llegan ya a su "zona cero", la de más peligro, la que se realiza más cerca del colegio Rías Altas. Denuncian que los ruidos interrumpen las clases y que las mediciones acústicas que el Concello de Culleredo dio por buenas fueron poco menos que orquestadas porque, para realizarlas, pararon los motores de muchas de las máquinas. Se quejan de que el colegio se quedará en un talud de una distancia de 14,20 metros y de que las proyecciones de piedras llegarán al centro escolar
GEMMA MALVIDO | A CORUÑA Los vecinos de Augas Mansas se quejan de que las obras de la tercera ronda interrumpen las clases de los niños que asisten al colegio Rías Altas.
No denuncian sólo las voladuras, que también, sino el trasiego de maquinaria pesada que hay, estos días, en las inmediaciones del centro escolar. Las obras del vial llegan esta semana a lo que los vecinos denominan "zona cero" y es que se encuentran a menos de dos metros del colegio.
Los estudios de las obras prevén que, a finales de esta semana, el colegio se quede a una distancia de 14,20 metros de la rasante; algo que inquieta a los vecinos, por el peligro que creen que supondrá.
Los afectados por las obras de la tercera ronda en este tramo que toca a la urbanización Augas Mansas denuncian además que el Concello de Culleredo hubiese dado por buena una medición de ruido realizada cuando casi todas las máquinas pesadas estaban paradas.
Durante las microvoladuras realizadas desde el mediodía de ayer, los vecinos no registraron corrimientos de tierra en sus propiedades, aunque los hubo que, la semana pasada sufrieron el impacto de los movimientos del firme en las estanterías de su cocina; tanto, que las recogieron del suelo.
A pesar de que los técnicos de la tercera ronda les aseguraron a los vecinos que el colegio no sufriría proyecciones de piedras a causa de las voladuras en este tramo de las obras, los vecinos no están tranquilos porque nadie les ha asegurado que, cuando empiecen las detonaciones del otro lado del talud -en la cara de la urbanización Augas Mansas- el centro escolar no sufrirá las consecuencias.
Los operarios de las obras de la tercera ronda realizan microvoladuras para deshacer la piedra por la que transcurrirá el vial y, después, con máquinas pesadas, como palas y picadoras, recogen los restos de las detonaciones; de este modo, crean un talud.
Los vecinos ya habían denunciado, antes de que las obras se acercasen tanto al colegio, que los trabajos de la tercera ronda afectarían a los escolares. Se quejan además los residentes en Augas Mansas de que las obras no hubiesen avanzado más durante el verano, para que los niños no sufriesen ahora las consecuencias de las detonaciones.
El Contencioso anula la licencia a una sala de fiestas del polígono de Castiñeiras
Considera "incompatible" este uso con el carácter industrial y comercial de la zona
Faro de Vigo – 23-10-09 - DAVID GARCÍA – BUEU
El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Pontevedra acaba de anular la licencia concedida en su día para la apertura de una sala de fiestas en el polígono industrial de Castiñeiras. El tribunal argumenta que este uso resulta "incompatible" con los usos industriales y comerciales de la zona y rebate la posible equiparación entre sala de fiestas y sala de reuniones, tal como pretendían los dueños. La jueza asegura en el fallo que esa comparación resulta "improcedente". La licencia municipal definitiva fue concedida en enero de 2007, bajo el gobierno del PP de Elena Estévez. El promotor del local era precisamente un miembro del ejecutivo municipal, el ex concejal Manuel Freire, y que actuaba en nombre de la sociedad mercantil Bueu Ocio S.L. La decisión de conceder esa autorización fue recurrida tanto por la empresa pública Xestur Pontevedra –que fue quien asumió la urbanización de la primera y la segunda fase del parque industrial– y por Conservas Antonio Alonso, una firma radicada en el propio polígono de Castiñeiras.
En un primer momento, los promotores intentaron abrir el local en 2003 bajo la denominación de salón de baile, pero ante las dificultades luego cambiaron la calificación por la de sala de fiestas. Con este cambio obtuvieron un informe favorable del arquitecto municipal del ayuntamiento en agosto de 2005 y en septiembre de 2006 se concedió la licencia provisional, que se convirtió en definitiva en enero de 2007.
Desde el primer momento, tanto Xestur como Conservas Antonio Alonso se opusieron a los distintos informes favorables y a los permisos concedidos. Alegaban que era un uso no permitido en la ordenanza que regula el funcionamiento del polígono industrial.
El fallo, con fecha 30 de septiembre, apunta que dicha normativa establece que "el uso global de toda la zona es el industrial y el comercial". Habla también de los "usos compatibles" y no específicamente como industriales o comerciales. Sería el caso de "almacenes, laboratorios, centros informáticos, oficinas, hipermercados, salas de reuniones, así como la venta y distribución de los productos correspondientes".
Así, la jueza afirma en la sentencia que "partiendo de una interpretación literal y conforme a derecho, de la normativa expuesta, resulta incompatible el emplazamiento de una sala de fiestas o análogas instalaciones, pues pretender encajar como sala de reunión una sala de fiestas es del todo improcedente". A continuación explica que las de reunión "están pensadas para conferencias, eventos comerciales... y siempre desde el punto de vista industrial y comercial, pero no para actividades de ocio nocturno, que no tienen ninguna relación directa ni indirecta con el uso principal". Para aclarar todavía más su postura, cita el Catálogo de Espectáculos Públicos e Actividades Públicas de Galicia, que define una sala de fiestas como "un establecimiento público [...] especialmente preparado para ofrecer desde un escenario actuaciones de variedades o musicales en directo, dispondrán de pistas de baile para el público, [...] pudiendo ofrecer servicio de bar, disponiendo de ropero y camerinos". Remacha que "de esta definición, para nada se desprende que se trate de una sala de reunión".
La sentencia todavía no es firme y el Concello de Bueu tiene un plazo de quince días para interponer un recurso de apelación ante el mismo juzgado o ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario