viernes, 22 de junio de 2007

Viernes 22 de junio de 2007

Mediterráneo

BENICÀSSIM. SI LAS NORMAS NO SE CUMPLEN, LA ZONA PUEDE VOLVER A DECLARARSE SATURADA.
La ZAS podría retirarse tras un año sin contaminación sonora
La Conselleria insta al consistorio a decidir cómo reducir los niveles acústicos.Colomer no tiene margen de maniobra para el verano, pero sí a largo plazo.
22/06/2007 ESTEFANIA MOLINER

La declaración de la Zona Acústicamente Saturada (ZAS) de Benicàssim solo podrá retirarse cuando "las mediciones del nivel de sonido realizadas en el área a lo largo de un año estén dentro de los límites establecidos por la ley", según fuentes de la Conselleria de Territorio. Para la resolución de cese, y con el objetivo de no ver reproducidas las circunstancias que motivaron la normativa, el Ayuntamiento está obligado, además, a adjuntar un Programa de Actuaciones con las medidas que ha aplicado para reducir esta contaminación acústica, tales como la ordenación de las actividades generadoras de ruido implantadas ya o bien a implantar; la regulación del tráfico rodado; los programas de minimización de la producción y de transmisión de ruidos; además del establecimiento de los sistemas de control.

Eso significa que, hoy por hoy, según fuentes de la Conselleria, "es el Ayuntamiento el que debe decidir cómo reducir los niveles sonoros de la zona, elaborando este Programa de Actuaciones".

Así que, aunque el margen de maniobra para modificar la ZAS este verano sea "nulo", como reconoció el alcalde, Francesc Colomer, en la reunión con los empresarios del ocio, el consistorio puede ya aplicar medidas paliativas para ir reduciendo el ruido.

No obstante, la Ley de Protección contra la Contaminación Acústica para la Comunitat contempla que, si se constatara una nueva superación de niveles, la Administración competente podría de nuevo declarar la ZAS.

Las Provincias

La policía de Benicàssim sólo sanciona a dos locales por incumplir el horario que marca la ZAS
El número de quejas de los vecinos se ha visto reducida a la mitad con respecto al pasado verano, cuando se registraron 70 denuncias
L. ORTEGA/M. ÁLVARO/ CASTELLÓN

Imagen de las plaza de los Dolores, donde se concentran la mayoría de pubs y epicentro de la fiesta de Benicàssim. Desde la entrada en vigor de la declaración de Zona Acústicamente Saturada (ZAS) en el centro de Benicàssim el pasado 1 de junio, la Policía Local del municipio ha denunciado tan sólo a dos locales de ocio por incumplimiento del horario de cierre. “Se ha notado mucho la entrada en vigor de la ZAS. Los propietarios están cumpliendo la normativa y, por ello, el número de denuncias y quejas por parte de los vecinos ha descendido”, aseguró ayer el jefe de la Policía Local, Eugenio Capitán.

Según Capitán, “el número de quejas de los vecinos del centro de la localidad se ha visto reducido a la mitad con respecto al pasado verano”. Además, los agentes han realizado dos denuncias más por falta de licencias en varios locales; otra de ellas fue retirada.

El total de denuncias durante los meses de verano del año pasado, ascendió a 70. Se espera que la aplicación de la ZAS rebaje considerablemente la cifra de este año, de forma que si el número de denuncias se mantuviera en torno a dos al mes, en todo el verano no se superarían la decena de multas.

Malestar de los empresarios
Por su parte, los empresarios de la zona se reunieron el miércoles con el equipo de gobierno para presentar las propuestas que les permitirían mantener un verano rentable. Entre las propuestas presentadas por los propietarios de locales de ocio, destacaron tres: mantener la hora de cierre de los pubs hasta las 3.30 horas; retrasar la hora de cierre de las cafeterías, restaurantes y demás locales una hora más, es decir, hasta las 2.30 horas; y por último, que varias patrullas de Policía Local controlen los posibles focos de ruido.

Además, los propietarios están tramitando la creación de una asociación de hostelería de la que formarán parte cerca de 40 locales. Esta asociación actuará como altavoz de los empresarios y como plataforma de denuncia para los pubs que no cuenten con licencia.

Cabe recordar que el alcalde de Benicàssim, Francesc Colomer, aunque aseguró que “el margen de maniobra del Ayuntamiento era mínimo”, adoptó el compromiso de dirigirse a la Generalitat para elevar una consulta “en el sentido de revisar los horarios, con el fin de evitar perjuicios mayores para el sector”.

20 minutos

El ‘botellón’ regresa a las noches sevillanas tras los exámenes
MARÍA JOSÉ LORA. 22.06.2007

La Alameda, Los Remedios, Torneo, La Florida y Felipe II son algunas de las zonas que se están viendo afectadas. Vecinos y empresarios de la noche piden al Ayuntamiento que actúe.

Llega el verano, el fin de los exámenes y el botellón cobra fuerza en Sevilla, a pesar de estar prohibido por ley desde noviembre. Y es que son muchos los jóvenes que cada fin de semana siguen reuniéndose en algunas calles para consumir alcohol.

Los vecinos de las zonas afectadas y los dueños de bares y terrazas están hartos de que se incumpla la norma, y más ahora que llega el calor y apetece salir.

La Alameda es uno de los puntos que se está viendo más afectado por las concentraciones de jóvenes, según Lola Dávila, de la Plataforma por el Derecho al Descanso.

No obstante, los exámenes finales están dando un respiro a los vecinos. «Del fin de semana pasado aún no he recibido quejas de los vecinos», apunta Pilar Solís, de la asociación de vecinos Alameda de Hércules, aunque asegura que «si sigue permitiéndose, tomaremos medidas». De momento, han recogido firmas para que se elimine esta práctica del barrio.

Los bares y terrazas también son parte afectada. «Estamos contentísimos», comenta irónico Alfonso Maceda, de la Asociación de Terrazas de Verano, Bares y Discotecas de Sevilla (Tebadis). «Esperemos que esto sea circunstancial y que el Ayuntamiento actúe», añade.

Más focos

También hay botellones, según Dávila, en Los Remedios (plaza de Cuba, calle Betis y calle Salado), en el entorno de Tablada, en Torneo, La Florida y Felipe II, y «amenazan con aumentar», agrega.

Por su parte, desde el Ayuntamiento se asegura que la Policía Local está actuando en los puntos de la ciudad afectados y que no se sabe «en qué se basan para decir que no se hace nada».

¿Y qué pasa con el botellódromo?

Ahora, la prioridad del Ayuntamiento es tener habilitado cuanto antes el nuevo botellódromo, ubicado en la bancada de la Expo. Sin embargo, los plazos no se están cumpliendo. Primero, se señaló que el recinto estaría perfectamente acondicionado antes del verano. Sin embargo, poco después se aseguró que no iba a estar preparado hasta después de la época estival. Los jóvenes pueden hacer uso de él, pero sin contar con ninguno de los servicios necesarios.

El Periódico de Extremadura

Un mal que entra por el oído
El ruido excesivo puede provocar todo tipo de trastornos sanitarios y sociales a los ciudadanos, además de un problema económico para las ciudades que lo sufren.
22/06/2007 J. ALVAREZ AMARO

Coches con una música tan estridente que hace retumbar los cristales de viviendas y oficinas. Motos que circulan a escape libre. Botellones a altas horas de la madrugada. O simplemente un tráfico excesivo.

Aunque no lo parezca, todo eso tiene efectos directos sobre la salud. Estrés, agresividad, sordera, fracaso escolar... El abanico de consecuencias generadas por la contaminación acústica es interminable, y éste es un problema especialmente grave en España en general y en Extremadura en particular.

El propio director general de Consumo y Salud Comunitaria de la Junta, Pedro García Ramos, reconocía ayer que actualmente hay "mucha tolerancia al ruido", tanto por parte de los ciudadanos como de las instituciones. De hecho, señalaba, en la comunidad hay siete asociaciones que se dedican a luchar por los derechos de los vecinos y no tienen demasiado eco. Como ejemplo señalaba que hasta la fecha ningún ayuntamiento de la región "ha declarado una zona saturada de ruido... y pueden hacerlo".

Y eso que la magnitud del problema comenzó a vislumbrarse tras el último gran censo del Instituto Nacional de Estadística, que señalaba en el 2001 que el 22,4% de las viviendas extremeñas sufrían ruidos procedentes del exterior.

Sanidad y economía

Pero pese al pasotismo generalizado que hay sobre este asunto lo cierto es que los efectos del ruido sobre la salud han sido confirmados por varios estudios sanitarios. La Organización Mundial de la Salud (OMS) lo tiene claro. Tanto que define el ruido como "todo aquel sonido que afecta negativamente al bienestar fisiológico o psicológico de las personas".

Malestar generalizado, estrés, trastornos del sueño, pérdida de atención, pérdida de oido, retraso escolar, conductas agresivas... la lista es interminable, especialmente cuando se trata de ruido nocturno que, por lo tanto, dificulta el sueño y el descanso multiplicando sus consecuencias.

Pero el ruido no es únicamente un problema para los ciudadanos, puesto que sus consecuencias afectan directamente a la economía y a la convivencia social. A los evidentes costes sanitarios se suman la baja productividad de los más afectados y los accidentes laborales y de tráfico.

Asimismo, y como bien se pudo comprobar hace unos años en la Plaza Mayor de Cáceres o en la calle John Lennon de Mérida, entre otros puntos, las zonas con más problemas de ruido sufren una importante pérdida de valor de sus inmuebles.

Un estudio sobre este asunto realizado por el doctor Daniel Bernabeu, médico adjunto del servicio de radiodiagnóstico del Hospital Universitario La Paz, en Madrid, concluye que el ruido "debe considerarse como un contaminante medioambiental de primer orden" con "efectos nocivos importantes sobre la salud de la población y su calidad de vida".

Los principales riesgos que sufren los adultos expuestos a una excesiva contaminación acústica, añade, son "las alteraciones psicológicas, la distorsión del sueño, la pérdida de audición y el riesgo de enfermedades cardiovasculares y respiratorias". En los niños el ruido provoca "alteraciones del sueño, problemas respiratorios y dificultad para el aprendizaje y el lenguaje".

Detalles.
Las claves del estudio
22/06/2007

En 1999 el Laboratorio de Física de la Uex empezó a desarrollar los primeros estudios sobre el nivel de ruido que sufren las ciudades extremeñas. En el 2004 esta unidad universitaria suscribió un acuerdo con la Junta de Extremadura para llevar a cabo un estudio global sobre el problema del ruido en toda la región.

A través de un modelo de trabajo desarrollado por el propio laboratorio se iniciaron los trabajos, centrados en el denominado "ruido comunitario", esto es, el existente en el exterior de los edificios residenciales y que "normalmente penetra en ellos a través de la fachada". La mediciones se hicieron a la altura de un primer piso.

Se realizaron tres tipos de muestreo: de una semana de duración con equipos de intemperie; de corta duración a pie de calle; y en interiores mediante dosímetros.

Los estudios se han centrado en 132 calles de 16 localidades de la región. También se han hecho análisis detallados de 10 centros hospitalarios y de cuatro residencias de ancianos.

SEGUN UN ESTUDIO DEL LABORATORIO DE ACUSTICA DE LA UEX, EL RUIDO "ES UN PROBLEMA EMERGENTE DE SALUD PUBLICA" EN LA REGION.
Nueve localidades sufren un nivel de ruido peligroso para la salud
Badajoz, Almendralejo y Cáceres encabezan el grupo de ciudades que superan los niveles máximos fijados por la OMS.La Junta quiere que el ´mapa del ruido´ elaborado por la Uex sea una "herramienta" para abordar el problema.
22/06/2007 JAVIER ALVAREZ AMARO

Un informe elaborado por el Laboratorio de Acústica de la Universidad de Extremadura (Uex) pone de manifiesto que la contaminación acústica constituye un asunto preocupante en la región. Tanto que, señala el documento preliminar presentado ayer, "el ruido debe ser considerado un problema emergente de salud pública en Extremadura". Y es que este estudio --realizado desde el Departamento de Física de la Escuela Politécnica-- señala que al menos nueve localidades extremeñas soportan un nivel de ruido superior al marcado como tolerable por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El Estudio de la situación acústica en Extremadura. Comparativa con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud , que aún no ha concluido, analiza la situación de 16 municipios extremeños y de puntos especialmente sensibles como hospitales, residencias de ancianos y centros educativos. Las primeras conclusiones resultan preocupantes, puesto que en términos globales la contaminación acústica es un problema de alcance sanitario --según los criterios de la OMS-- en, por orden decreciente, Badajoz, Almendralejo, Cáceres, Navalmoral de la Mata, Don Benito, Trujillo, Villanueva de la Serena, Mérida y Arroyo de la Luz.

CALLES CON PROBLEMAS En estas localidades el ruido es un problema generalizado, pero lo cierto es sus efectos van mucho más allá. Y es que en prácticamente todas las ciudades estudiadas hay alguna calle donde los vecinos conviven con un ruido "intolerable" según la calificación de la normativa extremeña.

En total se han analizado 132 calles de 16 localidades y los resultados son llamativos. En más de la mitad de las vías analizadas hay un exceso de contaminación acústica, y los porcentajes se disparan en las calles de Don Benito y Villanueva de la Serena. Eso es durante el día, mientras que por la noche el ruido se nota especialmente en las calles de Mérida, Don Benito, Plasencia, Badajoz, Miajadas y Villanueva de la Serena.

Por el contrario, los municipios con menos contaminación acústica son Monterrubio, Coria, Talayuela y Castuera.

En cuanto a la situación de puntos especialmente sensibles al ruido, el estudio del Laboratorio de Acústica de la Uex concluye que "todos los hospitales públicos de Extremadura superan los valores de referencia" de día y de noche.

"ENTORNO INTOLERABLE" Tanto es así, añade el informe, que "las medidas realizadas implican la catalogación de los entornos de los hospitales como intolerables" atendiendo a la propia normativa de la Junta. Si en las residencias de ancianos se aplicasen los mismos criterios se obtendrían resultados similares.

El catedrático de Física de la Universidad de Extremadura y coordinador de la investigación presentada ayer en Mérida, José Miguel Barrigón, explicó que el tráfico es el máximo responsable de la contaminación acústica que sufren durante el día las localidades extremeñas.

Por la noche el mayor problema es el de las grandes concentraciones que se producen por el ocio nocturno, un fenómeno que en algunas ciudades han analizado de forma individualizada con una conclusión contundente: "Sin duda es un elemento con un gran impacto". Aunque aclaró que el estudio todavía no ha concluido --faltan las mediciones de este año-- los investigadores de la Uex consideran que de cara al futuro sería positivo llevar a cabo estudios epidemiológicos para "evaluar y cuantificar con rigor las consecuencias sobre la salud que el ruido origina sobre las personas expuestas".

Por su parte, el director general de Consumo y Salud Comunitaria de la Junta de Extremadura, Pedro García Ramos, destacó el alcance de “un problema de salud pública”. Por eso, se mostró partidario de que el mapa del ruido elaborado por la universidad sirva como “herramienta” a las Administraciones a la hora de abordar el problema, y “especialmente a los ayuntamientos”, que son los que tienen las competencias. A su juicio, los gobiernos locales pueden tomar muchas medidas al respecto, como diseñar una regulación racional del tráfico o revisar las licencias de las actividades molestas. “No digo que sea fácil y queremos ayudarles”, apostilló García Ramos.

Hoy Digital

Regional
Los extremeños soportan un ruido callejero «intolerable o importante» Por el día ocurre en la mitad de las calles, y por la noche en la mayoría
J. L. AROCA/MÉRIDA

Los extremeños soportan un ruido callejero «intolerable o importante»

«Tenemos un serio problema en Extremadura». La mitad de las calles por el día, y la gran mayoría por la noche, presentan un nivel de ruido importante o «intolerable» y superan los límites marcados por la Junta, advirtió ayer Pedro García Ramos, director general de Consumo y Salud Comunitaria.

La situación es todavía peor alrededor de los hospitales públicos y residencias de ancianos, pues todas soportan un ruido máximo, «intolerable» según la normativa autonómica extremeña pues sobrepasan los 56 decibelios.

El Mapa del Ruido ha venido elaborándose en los últimos cuatro años por el laboratorio de acústica de la Universidad de Extremadura y los resultados son espeluznantes si bien están matizados, como señala García Ramos, con el hecho de que los extremeños estamos acostumbrados al parecer a este estruendo. El problema principal es el tráfico rodado.

Los profesores del departamento de física aplicada, mediante un convenio que tienen con la Consejería de Sanidad y Consumo, han venido midiendo minuciosamente desde el 2004 los ruidos diurnos y nocturnos en 120 calles de 14 poblaciones diferentes.

Don Benito, la peor

El resultado es ese: durante el día la mitad de las calles, y por la noche «la gran mayoría» ven destrozados los límites que marca la normativa autonómica, y si lo que se utilizan son las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) el balance es todavía peor pues todas los superan.

En conjunto, sumando día y noche, la ciudad más insoportable es Don Benito según la medición hecha en siete de sus calles (procuraron mezclar las a priori ruidosas con las que no), pues de 200 puntos totales que sería lo peor, alcanza 186.

Por el día el 72% de sus vías urbanas presentan un ruido «intolerable», más de 61 decibelios, y por la noche lo mismo (51 decibelios); «ruidosas» (58 y 48 db respectivamente) son el 14% de ellas por el día y 28% por la noche.

En ninguna calle por la noche el sonido el «admisible» que sería el grado más bajo, y por el día sólo en el 14% resulta «poco ruidoso».

Después, Mérida

Por la noche Mérida casi iguala a Don Benito en incomodidad, con la mitad de sus seis calles analizadas en estado «intolerable» y el resto «ruidosas», ciudad que queda también segunda en la clasificación general como peor con 150 puntos sobre 200; Mérida sin embargo ofrece un 17% de vías públicas que por el día son admisibles.

Empatada a 150 queda Villanueva de la Serena que en el 75% de sus cuatro calles de medición está intolerable o ruidosa.

Badajoz

La ciudad más grande de la región, Badajoz, es la cuarta más incómoda por ruidos según este estudio, con 135 puntos. Por el día el 51% de las 12 calles y plazas analizadas están en mala situación (el 42% son intolerables, el mayor porcentaje junto a Don Benito), mientras en el 49% el ambiente es poco ruidoso o admisible.

Por la noche la situación empeora en Badajoz y mucho. En el 75% de las calles se escucha un sonido «intolerable», es el peor dato de toda la Comunidad extremeña, y en otro 9% ruidoso mientras un 16% es afortunado como poco ruidoso.

Tras Don Benito, Mérida, Villanueva y Badajoz, ¿cuál es la quinta ciudad más incómoda por los ruidos? ¿Cáceres? No, es Zafra con 115 puntos negativos sobre 200, y sólo a continuación vienen Plasencia y Cáceres que pese a su tamaño son relativamente más cómodas en este problema con 114 y 97 puntos respectivamente.

En Cáceres seis de cada diez calles (y se estudiaron 36) presentan buenos niveles diurnos y por la noche algo menos, sólo cuatro, y en Plasencia la situación es buena por el día con siete de cada diez poco ruidosas o admisibles, pero la jarana nocturna lleva a que casi nueve de cada diez se conviertan en intolerables o ruidosas.

A continuación con 86 puntos se situaría Almendralejo y el resultado de Navalmoral es bueno aunque poco representativo pues sólo se ha medido el ruido en una calle.

Otras localidades examinadas fueron Coria, Trujillo, Miajadas, Castuera y Arroyo de la Luz.

Problema de salud

El responsable regional de Salud Comunitaria, García Ramos, ha señalado que el ruido se está convirtiendo en un nuevo problema de salud en Extremadura, «importante» en las grandes ciudades. Esta exposición crónica y progresiva exigirá seguramente en el futuro estudios clínico-epidemiológicos.

Son los ayuntamientos los competentes para arreglar el problema aunque «no es fácil».

La Voz de Galicia

Los vecinos sí ven motivo de alarma en los incidentes en zona de copas
Desde las zonas afectadas piden que la policía identifique a los agresores del vídeo
Pasadizo del Orzán y Pintor Vaamonde se perfilan como los centros de la violencia nocturna
(Lugar: f. m. | a coruña)

«Eso no es nada. Las hemos visto mucho peores, incluso este pasado fin de semana». Poco importa a quién se pregunte, en la zona de la plaza de Vigo todo el mundo ha visto ya los vídeos de las peleas nocturnas que unos vecinos del Orzán y de los alrededores de la calle Pintor Vaamonde han colgado en Internet; y todos coinciden también en que lo que se puede ver en ellos es «no sólo el pan de cada día, sino una muestra mínima de lo que aquí pasa cada fin de semana». Así lo afirma Isabel Iglesias, residente «desde hace décadas» en la zona, que asegura que «jamás había pasado algo así en el centro de A Coruña». La sensación de alarma cunde entre el vecindario, que afirma no entender la tranquilidad mostrada por la policía cuando asegura que el incremento de este tipo de incidentes en época estival está «dentro de la normalidad».

Las imágenes que pueden verse en el sitio de Internet YouTube bajo el título No podemos dormir , adelantadas ayer por la edición de A Coruña de La Voz , han sido grabadas desde un piso del portal 26 de la calle Emilia Pardo Bazán, un edificio con vistas privilegiadas a la movida nocturna de la calle paralela. Este vídeo supone, para el presidente de la asociación de vecinos del Ensanche, Gerardo Crespo, «una importante prueba para demostrar lo que está pasando, aunque la realidad sea todavía más cruda y las peleas sean mucho más numerosas». Por eso, los vecinos reclaman que estas imágenes sean utilizadas por la policía para identificar a los agresores. Incluso piden a los propietarios de los locales de ocio nocturno de la calle Pintor Vaamonde que prohíban la entrada de aquellos que puedan identificar como autores de los actos violentos.

Estos after hours siguen siendo el foco de todos los problemas. Emilio lleva 45 años trabajando de portero en el número 24 de la calle Emilia pardo Bazán, y no duda a la hora de situar la causa de estas agresiones: «Cambian el nombre del bar, pero la clientela de estos locales sigue siendo la misma. Son los mismos perros con distintos collares, y hasta que cierren a una hora prudente, se podrán grabar peleas el jueves, el viernes, el sábado e incluso el domingo por la mañana».

En la otra zona afectada por la violencia nocturna, el punto negro parece situarse en el pasadizo del Orzán, pero se extiende a las calles aledañas: «Puede que las peleas empiecen ahí, pero terminan donde cuadra», afirma Andrés González, vecino que asegura que la policía «no se atreve a entrar en según qué discusiones y bares».

El Ideal Gallego

Vecinos y hosteleros se unen para pedir una ley contra el botellón
Los hosteleros están con los vecinos del Orzán en contra del botellón. La proliferación de peleas en las zonas de copas han hecho que unos y otros se apoyen a la hora de reclamar que se prohíba beber en la calle. Desde la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de A Coruña consideran que detrás de las reyertas en las zonas de copas está el botellón que cada fin de semana se organiza en la plaza del Humor. Los dueños de los pubs destacan que cuando los jóvenes llegan a sus locales ya han ingerido grandes cantidades de alcohol y es cuando provocan las peleas. Los hosteleros reclaman al Ayuntamiento la aprobación de una ordenanza "antibotellón". Mientras tanto, exigen mayor presencia policial en la zona.
L.F. > A CORUÑA

Los hosteleros, sobre todo los que regentan locales de copas en el Orzán, ya están cansados de que cada vez que se habla de peleas, parte de la culpa recaiga sobre ellos. En absoluto se consideran responsables de los altercados que se producen en las inmediaciones de sus negocios. "El problema no es de los locales, el problema comienza en el botellón de la plaza de Humor", apunta el presidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de A Coruña, Héctor Cañete.

Los hosteleros aseguran que cuando los jóvenes llegan a sus establecimientos en el Orzán, "a las dos o a las tres de la madrugada, los chavales han ingerido tal cantidad de alcohol y, a veces, también drogas, que ya no saben ni lo que hacen", señala Cañete.

El presidente del colectivo insiste en dejar claro que las peleas se producen en la calle y que, "casi siempre", son los mismos implicados. "Son pandillas que todo el mundo conoce", comenta Cañete, que asegura que, en ocasiones, los propietarios de los pubs se ven obligados a prohibirles la entrada.

Por otra parte, los empresarios se defienden señalando que en el entorno de la plaza del Humor "también hay peleas, y bastantes, y allí no hay locales de hostelería".

Consideran que, hasta el momento, la vigilancia policial en el Orzán es insuficiente, por lo que reclaman que se aumente la presencia de efectivos con el fin disuadir a los jóvenes que provocan altercados.

No obstante, exigen, como medida más urgente y de mayor importancia, que el Ayuntamiento apruebe una ordenanza que prohíba el botellón. "Si se regula este fenómeno, creo que podremos empezar a ver situaciones más civilizadas que las vistas hasta ahora", argumenta Héctor Cañete. Cree que A Coruña debe equipararse a otras ciudades de España en las que ya existe la restricción de beber alcohol en la calle. En este sentido, expresan su "total" apoyo a los residentes en la zona del Orzán y a la asociación de vecinos, aunque se sienten dolidos con que, muchas veces, se les considere culpables "de todo lo malo que ocurre allí", por el simple hecho de abrir hasta la madrugada.

"Nosotros cumplimos con el horario que marca la ley, al igual, que en el asunto de los ruidos", replican.

"Cuando incumplamos alguna de estas normas podrán decirnos algo, mientras tanto, las responsabilidades habrá que buscarlas en otro sitio", concluyen.

La Verdad

MURCIA
Mazón: « La contaminación acústica es un problema de educación»
D.L./MURCIA

Mazón: « La contaminación acústica es un problema de educación»

«La unidad de las víctimas es clave. La creación de asociaciones de vecinos contra la contaminación acústica es un paso muy importante para luchar contra el problema y que las autoridades se conciencien. Si cada uno va por su lado no hay nada que hacer», afirmó José Luis Mazón. Y el abogado sabe bien de qué habla. Consiguió que el Ayuntamiento de Zaragoza indemnizara a los 55 miembros de la Asociación de Vecinos La Huerva-Moncasi, de la zona de bares de Moncasi, con 7.000 euros a cada uno por el ruido que soportaban cada fin de semana.

La demanda fue interpuesta por la asociación hace tres años. Hartos de la pasividad municipal se pusieron en manos de Mazón, quien subrayó que la sentencia fue pionera en España porque la demanda fue masiva e indicó que sólo en Sevilla se produjo un caso similar «cuando varios vecinos demandaron a la Administración por el botellón en la vía pública». También aseguró que el fallo de Zaragoza fue ejemplar.

Por su parte, Miguel Ballesteros comentó que «los ayuntamientos hacen caso omiso. Trabajamos para que los establecimientos sean insonorizados», pero no todo el mundo cumple. «El tema del ruido es un problema de educación. No sólo depende de los dueños de los locales, ya que fuera de ellos, cuando llega la hora del cierre, los clientes siguen creando escándalo y griterío, y las motos y coches, cuando definitivamente abandonan la zona, también causan un alboroto considerable», comenta Ballesteros.

En opinión de Adolfo López, «somos un pueblo ruidoso con nuestras fiestas, bodas y celebraciones en general; sólo Japón nos gana en ruido. Las normativas actuales no sirven para nada. Nos toman el pelo y no existe una voluntad de cumplir. Además, la concesión de licencias es un mercado que alimenta lor presupuestos municipales. No todos los locales cumplen las normas y encima expiden bebidas para ser consumidas en la calle».

Pedro Pozo afirma que «la Organización Mundial de la Salud no tiene directrices claras en este tema, pero está claro que los trastornos del sueño causan depresión y ansiedad».

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