El Mundo
Castelló Sense Soroll detecta un infiltrado que se hace pasar por socio.
La Fiscalía investiga un motocross en las fiestas de Alcalá por una denuncia por ruido.
El Ayuntamiento organizó en Alcossebre una carrera “con todos los permisis en regla”, aunque tras la acusación ha anunciado que cambiará su ubicación.
Javier Arnau.
Levante
El mapa sonoro sólo recoge una medición nocturna en las zonas de ocio
Gobierno municipal y oposición se enfrentaron ayer por las conclusiones del Mapa del Ruido -que en breve saldrá a exposición pública- que fija para la ciudad los límites de ruido aplicables a las zonas de uso terciario y que pasa de puntillas sobre las mediciones nocturnas en las zonas de ocio. El Mapa del Ruido puede ser «decepcionante» para los vecinos porque no servirá como herramienta para acreditar la necesidad de declarar Zona Acústicamente Saturada determinados barrios, como ocurre ahora en el Carmen y en Juan Llorens, según advirtió ayer la concejal socialista, Carmina del Río.
El Mapa del Ruido, elaborado por la empresa IVER para el consistorio, sólo ha registrado los datos de ruido en período de mañana y tarde en las calles con alta densidad de restaurantes, pues y cafeterías. El único monitor de medición de 24 horas -que mide el ruido nocturno- en el entorno de una zona de ocio está en la calle Ribera (Ciutat Vella) y ha registrado 63 decibeles por la noche -casi 20 más de lo recomendado para zonas residenciales- y 67 de día. En puntos más conflictivos para los vecinos desde el punto de vista del ocio nocturno como las calles Alta, Baja y Murillo (barrio de Carmen) o Juan Llorens sólo se han hecho mediciones hasta las 11 de la noche. Con todo, el mapa sonoro identifica como puntos conflictivos los entornos de ocio de Juan Llorens, las plazas de Honduras, Cánovas y el Cedro y la avenida de Aragón y recomienda la elaboración de estudios específicos.
Del Río, que el lunes acusó al PP de «maquillar los datos» reiteró ayer en rueda de prensa que el equipo de gobierno «miente» y «confunde» a la opinión pública al fijar para la ciudad los límites de ruido que rigen en las zonas de uso terciario (65 decibeles por del día y 55 por la noche). La concejal de la oposición enumeró cuatro normativas (la ley 7/2002 de la Generalitat, el Libro Verde de la Comisión Europea y las dos ordenanzas municipales del ruido) y una sentencia -la del Tribunal Superior de Justicia que obligó al consistorio a declarar ZAS el entorno de Menéndez Pelayo- que establecen que los límites de ruido a tomar en consideración para medir la calidad de vida en los barrios son 55 decibeles por el día y 45 por la noche. Del Río apuntó que la nueva ordenanza del ruido prevé que para entornos urbanos donde sea compatible el uso terciario y el residencial, como puede ser el barrio del Carmen, regirán los límites de 55-45 decibeles.
La concejal de Contaminación Acústica, Lourdes Bernal, insistió ayer en diferenciar los valores límite permitidos (65-55 decibeles) de los objetivos de calidad a largo plazo (55-45 decibeles). Añadió que la normativa contra el ruido de Valencia será «de las más ambiciosas» y apuntó que en «Madrid el límite por el día son 80 decibeles y 75 por la noche y en Barcelona se permiten hasta 75 decibeles la mayor parte del día».
Entre las novedades de la nueva ordenanza se incluirán la limitación de horario para los espectáculos de fuegos artificiales. Esta restricción se aplicará a todos los espectáculos pirotécnicos que no guarden relación con las fiestas tradicionales (fallas, fiestas de barrios, San Juan, la Feria de Julio), según informaron fuentes de la Concejalía de Fiestas. Se trata de establecer un horario de invierno -hasta las 22 horas- y otro de verano -hasta las 12 de la noche- para el disparo de castillos. El calendario de verano irá, en principio, del 1 de julio al 15 de septiembre. La decisión ha venido motivada por las quejas de los vecinos del entorno de la Ciudad de las Ciencias.
«Las obras del circuito deberán cumplir la Ley del Ruido»
L. B. B./H. G., Valencia
La presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos, Maria José Broseta, aseguró ayer que las obras del trazado de Fórmula 1 «deberán respetar los horarios de trabajo que decreta la Ley del Ruido ya que se construirá en una zona urbana». Broseta reaccionó así al ser interrogada por Levante-EMV sobre las intenciones de los futuros responsables del circuito de trabajar «día y noche» para poder construir la infraestructura en los próximos ocho meses, tal como aseguró el lunes a la Cadena Ser, Jorge Martínez Aspar consejero de Valmor Sport (la empresa que organizará la carrera). Broseta recuerda que al circuito «se le ha eximido de someterse a declaración de impacto ambiental. Pero sólo podrán trabajar de 8 a 22 horas, como en Mestalla, se trabajará según la normativa que haya y la Ley del Ruido no prevé casos especiales en zonas urbanas», aseguró la dirigente vecinal.
El ruido y el polvo son también motivo de preocupación entre los vecinos de Benicalap que conviven desde primeros de agosto con las obras del nuevo estadio. El presidente de la Asociación de Vecinos de Benicalap, Evaristo Muñoz, aseguró ayer que las obras no cumplen el horario de 8 de la mañana a 8 de la noche que fijó el ayuntamiento. «Hoy han empezado a trabajar a las 7 de la mañana», explicó. El polvo de los camiones ensucia las fachadas y los coches aparcados en la calle y afecta al centro de Salud de la calle Amics del Corpus, donde está uno de los accesos de los camiones al solar del nuevo estadio. Las medidas para minimizar las molestias, como el riego del perímetro del solar, a las que se ha comprometido la empresa con el ayuntamiento aún no se notan demasiado, dijo Evaristo Muñoz
El fiscal abre diligencias penales contra Alcalà por una prueba de motocross en Alcossebre
Emilio Regalado, Castelló
La Fiscalía de Castelló ha acordado abrir diligencias de investigación penal contra el Ayuntamiento de Alcalà de Xivert por el desarrollo, en las pasadas fiestas de agosto, de una prueba de motocross en el entorno de varias urbanizaciones de Alcossebre. El decreto, con fecha 10 de septiembre, está firmado por el fiscal jefe en funciones de la Audiencia Provincial, Juan Salom, y recoge que se remitirá oficio al Fiscal de Sala de Medio Ambiente y Urbanismo.
Los hechos, denunciados por los vecinos de la zona, se remontan al pasado 25 de agosto cuando, con motivo de las fiestas patronales de Acalà de Xivert, el ayuntamiento permitió una competición de motocross en una parcela que, según los denunciantes, no disponía de las condiciones necesarias para desarrollar una actividad considerada molesta e insalubre por la ley.
La finca en cuestión, de unos 25.000 metros cuadrados y considerada suelo urbanizable no programado, es propiedad de un conocido promotor urbanístico de la localidad y se sitúa en el entorno de las urbanizaciones Racó del Val, Santa Llúcia y Montemar. El pasado mes de marzo los vecinos ya detectaron movimientos de tierra, lo trasladaron al ayuntamiento y desde el consistorio se negó que hubiese prevista alguna actuación urbanística.
La sorpresa para los vecinos se produjo durante el mes de agosto, cuando vieron que una pala excavadora estaba creando pequeños montículos y, asimismo, se plantaban neumáticos para crear una pista de motocross.
Los residentes acudieron de nuevo al ayuntamiento para pedir información al respecto y comprobaron finalmente que en el propio programa oficial de las fiestas patronales aparecía el anuncio de una competición de motocross en el denominado «Circuito Racó del Vale», iniciativa organizada por el Moto Club Xivert.
Los vecinos, según las fuentes consultadas, remitieron un escrito al ayuntamiento advirtiéndole que que el motocross está incluido en las actividades prohibidas a distancias inferiores a 2.000 metros de núcleos urbanos, además de ser considerada actividad molesta e insalubre.
Alternativas
Además, apuntaron que hay espacios suficientes entre Alcalà y Les Coves de Vinromà para instalar un circuito de estas características sin necesidad de «molestar» a ningún vecino. Los denunciantes, tras comprobar que la prueba se realizaba sin mayor problema pese a sus quejas, realizaron pruebas sonométricas «y se consiguieron niveles de 101 decibelios».
Por todos estos motivos, reclaman que se investigue la razón por la que el ayuntamiento, según señalaron fuentes municipales en su día, ignoraba dónde se iba a realizar la prueba, así como por qué la permitió pese a las advertencias de los vecinos de las urbanizaciones.
También recriminan al consistorio que no haya asegurado el precintado del terreno tras la prueba para evitar la presencia de motoristas y, en definitiva, se reclama que se depuren responsabilidades en el ayuntamiento para aclarar por qué autorizó una prueba que, presuntamente, no dispone de las licencias ni los permisos adecuados para llevarse a cabo en una zona con numerosas viviendas.
Desde este rotativo se intentó ayer sin éxito contactar con el alcalde y el resto del equipo de gobierno, así como con los promotores de la prueba deportiva.
Las Provincias
Castellón
El Ayuntamiento de Valencia estudia limitar a 30 kilómetros hora la velocidad en varias calles
Expertos aseguran que el sistema servirá para reducir la siniestralidad, el tráfico y la contaminación ambiental en la ciudad
C. FERNÁNDEZ/ VALENCIA
El concejal de Tráfico de Valencia, Alfonso Novo, anunció ayer que ha encargado un estudio a sus técnicos para crear un mapa viario con calles donde la velocidad máxima sea de 30 kilómetros por hora. “Hemos solicitado un informe para ver donde se pueden poner en marcha. Esperamos tenerlo finalizado antes de concluir el año”, explicó Alfonso Novo.
“Este nuevo proyecto de seguridad en Valencia no es nuevo en España ni en Europa, está dando muy buenos resultados y los expertos lo aconsejan”, añadió el concejal de Tráfico.
Novo comentó que el estudio comenzaría por el centro de la ciudad “y por supuesto este límite de velocidad se establecerá en vías que no sean arterias principales”, apuntó el concejal de Tráfico, que avanzó este proyecto durante la rueda de prensa sobre el día europeo del coche que se celebrará este sábado.
Reducir la siniestralidad
Ciudades que ya tienen calles donde se puede circular hasta 30 kilómetros por hora son Madrid, Barcelona, Palma de Mallorca, San Sebastián, Granada y Oviedo. “Los efectos positivos se han comprobados porque en estas zonas ha descendido la siniestralidad entre un 15 y un 20% y el tráfico se ha reducido”, añadió Luis Montoro, presidente de la Fundación Española de Seguridad Vial.
En esta materia los europeos son los más avanzados y paises como Alemania, Dinamarca, Francia Suecia, Italia o Suiza, cuentan con calles 30 desde hace años. De igual forma, Gran Bretaña, también está realizando un serio proyecto para establecer este tipo de vías en la ciudad.
“Sin duda, es un sistema positivo para evitar llegar a una situación drástica de hacer calles peatonales, pero siempre se debe poner en marcha en lugares donde esté justificado y se haya transmitido a los ciudadanos. Los conductores deben saber que un atropello es mortal si van a 50 kilómetros por hora”, afirmó el catedrático de Seguridad Vial, Luis Montoro.
Pero este tipo de calles 30 no se podrán instalar en cualquier punto de Valencia, “lo recomendable es que se aplique en vías por donde no circulen más de 5.000 vehículos al día”, afirmó Luis Montoro.
Junto al descenso de la siniestralidad, estas vías también incidirán en la reducción de la contaminación. Uno de los objetivos en los que ya está trabajando el Ayuntamiento de Valencia. “Este año se han habilitado 500 nuevas plazas de aparcamiento para bicicletas y 200 para motocicletas, que en total suman 2.500 y 2.000 plazas respectivamente. Además, somos la ciudad de España de más kilómetros de carril de bici con 75,5 kilómetros”, dijo Novo.
El responsable de tráfico también aclaró que se han peatonalizado 5.000 metros cuadrados dentro del programa de peatonalización y ampliación de aceras desarrollado por el Ayuntamiento.
La presidenta de la Federación de Asociaciones de vecinos le pareció muy buena idea esta iniciativa de la concejalía de Tráfico. “Esta Federación ya lo había pedido desde hace tiempo y sin duda será una oportunidad para que se reduzca el número de vehículos.
VALENCIA | CIUDAD
El PSPV critica las escasas mediciones hechas en horario nocturno para elaborar el mapa del ruido
Del Río reclama que el estudio se amplíe a todas las zonas de ocio
P. M./ VALENCIA
La concejala socialista Carmina del Río criticó ayer las escasas mediciones realizadas por las noches para la elaboración del mapa del ruido de Valencia, en lo que avanzó que podría ser una de las alegaciones que presenten cuando el documento salga a exposición al público.
Citó como ejemplo que en el centro de la ciudad “sólo se ha colocado un sonómetro en la calle Ribera, cuando hay barrios donde el ruido nocturno es un problema”, en referencia a la zona saturada de bares en varias calles del Carmen.
La ausencia de mediciones específicas para las zonas de ocio, lo que no se contempla en este tipo de mapas, también fue algo criticado por Del Río, quien insistió en que el máximo legal que permite la normativa actual es de 55 decibelios de día y 45 de noche, diez menos en cada caso de lo que aparece en el documento elaborado por una empresa para el Ayuntamiento.
La concejala de Sanidad, Lourdes Bernal, replicó que los máximos legales son 65 y 55 decibelios, para anunciar que hoy presentará el documento en la Federación de Vecinos, como primer paso para la difusión del mapa del ruido. Tras su envío a la Unión Europea, el Ayuntamiento tendrá un nuevo plazo para el llamado plan de actuación.
Según las mediciones, todos los distritos superan el máximo permitido por la noche, mientras que durante el día y la tarde se reduce a cuatro. El plan de actuación consiste en una serie de mejoras, como el empleo de asfalto fonoabsorbente en y abundante plantación de arbolado para que sirvan de pantallas acústicas en las grandes avenidas, entre otros ejemplos.
VALENCIA | SOCIEDAD
Los vecinos de Patraix ruedan una película para denunciar los problemas que sufre el barrio
El filme, donde los protagonistas son los residentes, se proyectará durante las fiestas
J. BATISTA/ VALENCIA
Rodrigo Díaz de Vivar ha llegado a Patraix. El Cid es uno de los protagonistas de la película que estos días ruedan los vecinos con la finalidad de llamar la atención de las administraciones ante los problemas que sufre el barrio: la ubicación de la clínica Virgen del Consuelo, la subestación de Patraix o los tapones urbanísticos que sazonan una de las zonas más emblemáticas de Valencia. El corto recibirá el nombre de El Cid en Patraix.
“Es una forma de expresar las reivindicaciones vecinales uniendo tradición, cultura y fiestas”, explicó ayer Antonio Pla, presidente de la asociación de vecinos. En el rodaje participan cerca de 30 personas. Hay 18 extras y cuatro personajes principales, encarnados por vecinos del barrio.
La trama del film, que mezcla realidad y ficción, empieza con el encuentro entre el Campeador y un leproso que le narra las dificultades que se viven en un pueblo cercano a Valencia llamado Patraix, donde la falta de infraestructuras y servicios está mermando la calidad del vida de los residentes.
Entonces, Rodrigo Díaz de Vivar decide enviar a un fiel consejero para que viva en primera persona esas dificultades y para que le tenga puntualmente informado. “Se visita la clínica Virgen del Consuelo, la subestación y otras zonas con problemas generales”, explicó Pla. De hecho, son algunos de los escenarios exteriores que se han elegido, así como la tranquila plaza de Patraix, en pleno corazón del barrio.
Tras recopilar la información, el embajador del Cid da buena cuenta de las dificultades que atraviesa Patraix, lo que lleva al Campeador a movilizar sus tropas para ayudar y evitar una revolución.
El desenlace, consistente en una batalla contra los malos, en este caso las administraciones, va acompañado de una moraleja. “Se mezcla ficción y realidad con la idea de invitar a una reflexión: tu barrio o tu ciudad puede cambiar si participas”, añadió el dirigente vecinal.
El corto se proyectará durante el pregón de las fiesta populares del barrio, previsto para el 5 de octubre. La idea de mezclar al personaje histórico con los problemas diarios de Patraix se debe a que los festejos de este año honran a las ocho provincias que recorrió Rodrigo Díaz de Vivar durante su travesía hasta Valencia, aprovechando la conmemoración del octavo centenario del poema del cantar del Mio Cid. Para las fiestas, el artista Pablo Ovejero ha diseñado una fuente que portará los escudos de las distintas regiones.
VALENCIA | CIUDAD
47 bares serán multados si no retiran las mesas y sillas ilegales
J. BATISTA/ VALENCIA
La campaña iniciada por el Ayuntamiento para evitar la proliferación de mesas y sillas no homologadas en las terrazas de los bares ha empezado a dar sus frutos. Tal y como explicó el concejal de Participación, Ramón Isidro Sanchis, 47 locales han sido apercibidos de sanción por utilizar mobiliario ilegal. Sanchis explicó que en la primera visita se les advierte, aunque en caso de reincidencia serán sancionados en función de lo que determine la ordenanza reguladora de Mesas y Sillas.
La normativa contempla criterios para el mobiliario de las terrazas que buscan homogeneizar la imagen de las calles. Así, sólo se permiten sombrillas blancas con la publicidad pequeña, y mesas y sillas de aluminio, que pueden llevar trenzados en otros colores.
“En todo caso es patente la buena predisposición de los hosteleros ante las visitas de inspección, y probablemente no sea necesario llegar a iniciar los procedimientos sancionadores”, explicó el concejal.
La campaña informativa se está llevando a cabo con la colaboración de la Federación de Empresas de Hostelería de la Provincia de Valencia.
El País
El PSPV pide más medidores del ruido nocturno en Valencia
C. V. - Valencia - 19/09/2007
La concejal socialista en el Ayuntamiento de Valencia Carmina del Río rebatió de nuevo la teoría del equipo de gobierno, según el cual solo cuatro distritos de la ciudad excederían los niveles de ruido permitidos por la Unión Europea. Del Río presentó ayer las ordenanzas municipales de la ciudad -la nueva y la antigua-, la ley autonómica sobre el ruido, la estatal, los de la OCDE y hasta una sentencia sobre el exceso de decibelios para insistir en que los niveles recomendables son 55 decibelios de día y 45 de noche en las áreas residenciales de Valencia. Con estos umbrales, un 86% de la población de la ciudad soportaría niveles de ruido por encima de lo recomendable.
Del Río precisó que los 65 decibelios diurnos y 55 nocturnos que toma de límite el mapa del ruido encargado por el Ayuntamiento de Valencia siembran la confusión entre los ciudadanos. La concejal socialista anunció además que su grupo presentará como alegación al proyecto de mapa del ruido encargado por el consistorio la necesidad de que se instalen más medidores de 24 horas en distritos tan céntricos como el Pla del Real. "Sólo hay 62 puntos de medición de 24 horas en toda la ciudad, lo que consideramos insuficiente", precisó
CRÓNICA: LA CRÓNICA
Curso de botellón para selenitas
XAVIER THEROS 19/09/2007
http://www.elpais.com/articulo/cataluna/Curso/botellon/selenitas/elpepuespcat/20070919elpcat_19/Tes
Ha sucedido este verano. El amigo de un amigo mío fue multado por beberse una lata de cerveza en la calle. El hombre se supone que tenía sed. Y fue así, dicho en casto pareado, que: "Como presunto participante en un flagrante botellón, impuesta le fue una gravosa sanción".
Yo, que para estas cosas soy muy mío, me pongo los quevedos y salgo a la calle a observar. Primer obstáculo para valorar el incidente: como todo vecino del centro, estoy tan inmunizado a los grupos de turistas -a cualquier hora bebiendo por la calle- que a primera vista no los veo. Pero me fijo y aparecen. Los encuentro en las Ramblas, en los alrededores de las Ramblas y bajo mi portal, cuando a las tantas vienen a rondarme con sus bongos y bandurrias. También estoy acostumbrado a ver grupos de señores asiáticos que te abordan por la calle, de noche, por si te apetece amenizar el paseo con una cervecita o te has quedado seco al cerrar los bares. Pero eso ya es la madrugada y mejor lo olvidamos. Volvamos, pues, a la luz diurna.
Metro línea amarilla, las dos de la tarde. Un grupo de italianos se beben unas cervezas en el andén, acalorados y sin camiseta. ¡Aurresku!, primera conclusión: lo que está prohibido no es beber alcohol por la calle. ¡Quiá!, todo el mundo lo hace sin pudor ni disimulo. Lo que no está permitido es beber solo. Para beber dentro de la ley hay que ir en grupo. De esa forma -debe razonar el consistorio- se evita que la gente se alcoholice en soledad y haga una tontería.
Salgo del metro. Paseo de la Barceloneta. Ahora sigo a un grupo de jóvenes sedientos. Pero, aunque agudice el oído, no entiendo nada. Segundo obstáculo: la inmensa mayoría de los grupos de bebedores con los que me cruzo están compuestos por adolescentes caucásicos, muchos de ellos rubios y de países comunitarios, que están de vacaciones y hablan a lo suyo. Dado que Barcelona es una ciudad de ocio -donde se viene a pasarlo bien y desfasarse-, estos veraneantes sostienen sus frescas latas con la apostura natural de unos Adonis. ¿Se imaginan a la autoridad diciéndole al pelotón de teutones o de ingleses que eso que llevan en la mano no es refresco, sino artículo sancionable? Sin embargo, el amigo de mi amigo es bajito, moreno, chileno, y no está precisamente de vacaciones. Cuando le cogió la sed salía de trabajar de camarero (que también son ganas ponerse a trabajar, con lo enrollada que es la Barcelona post-Fórum). Lo que nos lleva a la segunda conclusión: no está prohibido beber por la calle si estás de vacaciones, lo censurable es hacerlo a media jornada laboral. ¡Hay que leerse la letra pequeña, coruje!
Y aquí llegamos al que, creo yo, es el meollo del asunto. Estoy convencido de que en el espíritu de las ordenanzas municipales no hubo la menor animadversión por el hecho de que el amigo de mi amigo bebiese solo o fuese camarero. Creo yo que lo sucedido se debió a una rigurosa aplicación de la normativa. Verán, el tercer obstáculo de mi pesquisa es que, para seguir a un grupo de turistas cerveceros, hay que caminar mucho. A diferencia de sus homólogos mayores -que obstruyen la circulación al menor monumento-, los ejemplares jóvenes de esta especie se mueven constantemente. Son masas compactas, de entre 8 y 12 integrantes, de ambos sexos, que se patean la ciudad a ritmo vertiginoso. Algunos, incluso alquilan una bicicleta y aterrorizan a los peatones haciendo sonar sus timbres en las calles estrechas. Éstos, curiosamente, son la fracción civilizada, sostenible y ecológica del fenómeno. Los otros van a pie, se ríen a voces y caminan. Tercera conclusión: para ser botellón, da igual que sólo haya una persona. Lo importante es que esa persona se esté quieta, nunca al trote. Si camina ya no es botellón.
Claro que, cuando le cuento mis conclusiones a mi amigo, me mira escéptico. Según él, no he tenido en cuenta un cuarto y definitivo obstáculo: su amigo se encontraba a escasos tres metros del bar donde había comprado la cerveza. Aquí ya no entiendo nada y llega -como agua de mayo- la cuarta conclusión: el Ayuntamiento cobra por las terrazas, ergo no desea que les den malas ideas a los clientes. Si así fuere, la ley se lo premie, por defender a un sector turístico que con las lluvias de agosto no ha hecho su ídem.
Conclusión final: nos hemos despistado, yo, mi amigo y el amigo de mi amigo. La multa no tuvo nada que ver con la lata, sino con el bocadillo de mortadela de aceitunas con que el infractor iba a acompañar la cerveza. ¡Y eso sí que no!, ¡hasta ahí podríamos llegar! Muy bien por la autoridad en sus desvelos dietéticos que al multar al susodicho, bocata en mano, preservó la buena imagen del terruño de Ferran Adrià.
Así que ya lo saben: según las ordenanzas, está prohibido beber cerveza en la vía pública, en soledad y quieto en un punto fijo, no estando de vacaciones y en posesión de embutido barato. Conductas execrables, todas ellas, en una ciudad que está a punto de convertirse en el mayor parque temático del Mediterráneo.
Aviación Digital Global
Ha costado 111 millones financiados en un 50% por la UE Ver debate (0)
El proyecto de reducción de ruidos "Silence" entra en su fase final
Raúl Palomar /ADG
http://www.aviaciondigitalglobal.com/noticia.asp?NotId=4275&NotDesignId=4
El proyecto Silence(R) comenzó a desarrollarse en 2001 y ha costado 111 millones de euros financiados en un 50% por la Comisión Europea y el resto por la industria del sector. Ahora Silencer está a punto de ver la luz.
Originalmente, el proyecto estaba previsto que se desarrollara en 48 meses pero se extendió hasta seis años e involucró a 21 compañías, universidades y centros de investigación. Su meta era descubrir tecnologías capaces de reducir el ruido de los motores controlando el coste, peso y actuaciones.
Entre los participantes se incluía a Snecma, coordinador del proyecto, así como a Rolls-Royce, Airbus, la británica Qinetic, y las agencias de investigación aeroespacial holandesa, francesa y alemana, además del Trinity Collage de Dublín, Alenia, Dassault, Dornier, Messier-Dowty, Turbomeca y Vibratec.
Silence(R) fue la quinta "plataforma integrada" del programa de investigación. Sus objetivos fueron la validación de las tecnologías individuales, la identificación de la aplicabilidad de esas tecnologías sobre el producto, y el análisis coste-beneficio.
Previamente se han financiado proyectos europeos incluidos en Silence(R) como
Resound, para la reducción del ruido de los motores a través del diseño innovador; RANNTAC, de reducción del ruido de los aviones mediante el tratamiento y el control activo; y Rain, cuyo proyecto giró acerca del ruido producido por las estructuras.
Combinado con los procedimientos operacionales de bajo ruido que se desarrollaron al mismo tiempo, el silence(R) ha conseguido una reducción de 5 dB, lo que representa un progreso significativo hacia el objetivo impuesto para el 2020 de 10 dB.
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